Una mirada desde adentro. Abunda el humo de cigarrillos. Son todos chicos agradables, lindos, pero la situación no es lo que me imaginaba. Lo que veo puede ser interesante durante cinco minutos, pero no tarda en volverse normal, relajado, incluso trivial. Van y vienen teniendo sexo, se turnan, se besan, hablan de series, se lamen, bombean y comentan chismes. Veo una acabada. Se ríen un montón. Otro dedica largos minutos a buscar y a cambiar las películas porno que se proyectan en un Smart TV grande.
Escáner del cerebro
Ellas son infieles, pero tienen sus razones Las maduras solo quieren a los jóvenes para un rato. En declarado, de unos 34 años. Así lo ha determinado una encuesta realizada por el sitio web de citas extramatrimoniales Gleeden.
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Se trata de un juego que, normalmente, se suele hacer en fiestas de jóvenes y adolescentes que quieren foguear con los besos y con los primeros contactos físicos. Las reglas las podéis establecer vosotros antes de aventurar para que, así, todo el globo lo pase de miedo. Normalmente, es un juego que se suele actuar en discotecas ya que, entre cubata y cubata, el hielo se convierte en un gran protagonista.
El juego del hielo
Yo estoy en las mismas, u es algo bien feo, siento q ya no me quiere Lorena dice: 4 febrero, a las am Mi esposo esta igual. No besa. No toca.
